lunes, 27 de septiembre de 2010

Generales FF.AA Aquino García y Medina enfrentados por control de la cúpula militar

La lucha por el poder y control militar mantiene prácticamente enfrentados a los generales Ramón Aquino García y Belisario Medina y Medina, director del Departamento Nacional de Investigaciones (DNI) y el jefe del Cuerpo de Ayudantes del presidente de la República, respectivamente. Trascendió que en varias ocasiones el jefe del Estado ha tenido que variar designaciones y nombramientos de altos jerarcas militares pertenecientes a estas dos facciones por las contradicciones que entre esos dos mayores generales, a veces se presentan.

El pugilato de estos dos militares muy cercanos al presidente Fernández ha llegado a tal punto de que muchos militares se jactan en decir “yo soy un hombre del general Medina y Medina” expresión que también se escucha en boca de los seguidores de Aquino García.

El actual director del Departamento Nacional de Investigaciones( DNI) Ramón Aquino García es un hombre de entera confianza del jefe del Estado al que se le ha considerado leal y que ha estado al lado del presidente dentro y fuera del poder.

Aquino fue jefe del Cuerpo de Ayudantes Militares y ex Secretario de Estado de las Fuerzas Armadas y mantiene desde hace muchos años una amplia cercanía con Leonel Fernández.

Mientras, que Belisario Medina y Medina, actual jefe militar del presidente de la República, quien ha logrado granjearse su amistad y confianza generando celos y alejamientos entre ambos jerarcas militares. El mayor general Medina Medina es hermano de una connotada dirigente peledeísta y actual legisladora.

En la actualidad los cuadros militares que manejan las instituciones castrenseen su gran mayoría han sido recomendados por Aquino García y Medina y Medina.

De estos nombramientos recomendados por estos altos oficiales solo escapa el jefe de la Marina de Guerra, Luis Homero Lajara Solá, cuya enllavadura procede de la Casa de Gobierno y especialmente del Consultor Jurídico , doctor Abel Rodríguez del Orbe.

Aunque esas diferencias se mantienen con mucha discresión muchos altos militares han tenido que hacer causa común con uno u otro de estos dos jerarcas, para no quedar fuera de la fiesta y disfrutar del pastel que significa el poderío militar.